Echar raíces en el paisaje
Nos situamos en la vega de Granada para desarrollar un espacio dedicado a las investigaciones y la convivencia de 15 alumnos. El objetivo será generar un contacto directo entre el lugar (la vega), lo que esta ofrece (agricultura) y el móvil (las personas).
Partimos desde unos elementos verticales que generan anillos de diferentes radios hasta crear una trama circular. A partir de esta, obtendremos dos espacios diferenciados: la torre y la galería. La Galería, parcialmente enterrada, ofrece la residencia a los estudiantes y tambien los espacios que compartirán. Por otro lado tenemos La Torre donde encontraremos la comunicación mediante una escalera de caracol y las diferentes aulas y laboratorios.
Se desarrollará un proyecto de paisaje con el fin de crear una zona de bosque, cuya conexión con los campos de cultivos se hará mediante diferentes escaleras atravesando el edificio.
El espacio interior se genera mediante ‘no tabiques’ curvos que se abren y se cierran siguiendo el mecanismo de una ‘persiana horizontal’ dando posibilidad de realizar diferentes actividades en un mismo espacio.
Tanto en cubierta como en los alrededores habrán pequeñas zonas de cultivos que ayuden a las investigaciones de los alumnos. Para obtener la mayor diversidad de cosechas nos ayudaremos de un sistema de riego y máximo aprovechamiento del agua de la (escasa) lluvia.
El cerramiento está formado por lamas de madera móviles que abrazan al edificio y permite la entrada (o no) de la luz.
En cuanto a la cubierta, esta funcionará como aljibe ofreciendo un riego continuo a la huerta superior, mayor confort térmico interior y frescor en la azotea.