GRUAS Y TOBOGANES 

 

Tras el análisis rápido del barrio y la interpretación espacial de la parcela preexistente se decide la proyección de un parque infantil para romper el ciclo de la gentrificación que sucede cada vez con mayor intensidad en la ciudad de Granada. 

El parque infantil está basado en el concepto del juego a través de las transiciones (ascenso y descenso) desde el primer paso en el acceso principal hasta la parte más alta del proyecto. 

Sustentado en 2 estructuras metálicas en forma de “grúas”, se proyectan plataformas repartidas por el espacio influidas por escultores como Alexander Calder o Jean Tinguely. 

Todo atado y revuelto en sistemas de redes y toboganes, influenciados por Carsten Holler, una gran burbuja inflable central a modo de castillo hinchable y un sistema de tirolinas para los más valientes.