El proyecto consiste en ofrecer un espacio arquitectónico a partir de haber comprendido una estructura. Dicha estructura se ha realizado de manera que se presenten los conceptos del libro «El lenguaje de la visión» de Gyorgy Kepes: la semejanza, la proximidad, el cierre y el ritmo.
La idea de representar de forma más genuina los conceptos es proponiendo una estructura flexible que dota a la estructura una transformación de estancias. La estructura principal del edificio se puede levantar, quedando expuesta como una casa de muñecas, así las paredes del primer formato pasan a ser los suelos de dos plantas. Ofrecer esa flexibilidad al espacio dejan muchas posibilidades para las actividades que quiera desarrollar el usuario.
Un espacio de cambio que se abre y se cierra, como una trampa.